Josef Albers, 1959. Oil on Masonite. 47 1/2 x 47 1/2 inches. Guggenheim Museum, New York.
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Esta obra pertenece a una de las series de pinturas más famosas de Albers, que presenta cuadros creados a partir de un color puro, cuya ilusión óptica permite relacionarlos con el Op Art.
Se trata de cuatro cuadrados en tonos que van del amarillo al verde, que se superponen. A pesar de la rigidez del formato, las formas flotan libremente, creando una ilusión optica de otra dimensión.
Cada superficie ha sido pintada en un solo color, sin gradaciones de tonos, aplicándose la pintura con espátula, directamente del tubo, para evitar así diferencias tonales. La manera de aplicar el color lo vinculan con el movimiento de la Abstracción Postpictórica.